¿Debes, o no, usar acondicionador de pelo? La respuesta es un rotundo “Si”. Indistintamente de tu tipo de pelo -sin importar si es una melena virgen o sometida a tratamientos agresivos- debes incluir productos hidratantes a tu ritual de belleza. En todo caso, lo único que cambiaría, es la frecuencia de uso y el tipo de acondicionador a comprar.
Hay acondicionadores especialmente formulados para cada tipo de cabello: ondulados, secos, teñidos, rubios, muy finos o frágiles, para aportar volumen, reparar o, simplemente, de uso diario. Mas, básicamente, todos tienen la misma función: penetrar en cada hebra para mejorar su condición.
Recordemos que el champú se encarga de limpiar y así eliminar cualquier impureza del pelo. Solo un buen acondicionador de pelo es capaces de –como lo indica su nombre- “acondicionar” el pelo para sellar la cutícula, reducir asperezas y aportar suavidad.
Los primeros acondicionadores que salieron al mercado eran de uso exclusivo para caballeros. Aunque en la actualidad son las mujeres quienes dinamizan la industria de la cosmética y el cuidado capilar, hace más de un siglo, en el año 1900, eran los hombres quienes demandaban un producto para “domesticar” sus rebuscadas cabelleras, barbas y bigotes.
El creador del acondicionador de pelo, Edouard Pinaud, era un químico francés, que aprovechó la Exposición Universal de París para anunciar un tónico suavizante llamado “brillantina”, que sirvió de precedente para nuevas fórmulas concebidas para reavivar cabellos dañados desde la primera aplicación.
Para entender mejor lo que hace el acondicionador en pro de nuestra melena, solo nos basta decir que el acondicionador es al cabello, lo que una buena crema hidratante es a la piel. Una piel seca carece de brillo, es áspera, escamosa y dañada.
Adicionalmente, usar acondicionador para el cabello es bueno por:
Cierra la hebra capilar. La contaminación, el uso de herramientas de calor, algunos productos químicos o hasta el peine que usamos a diario pueden deteriorar la cutícula del pelo (parte externa) creando escamas que restan vistosidad y fuerza. Los acondicionadores hidratan, pulen y alisan.
Reduce el encrespamiento. El frizz es el resultado de un cabello sin humectación. La fórmula de la mayoría de los acondicionadores incorpora agua y aceites hidratantes que combaten el pelo rebelde.
Menos nudos. Un cabello seco y deshidratado es la “madre” de los nudos. Usar el acondicionador de manera frecuente permite una cabellera manejable, fácil de peinar, con menos quiebres y pelos sueltos arriba de la cabeza.
Aporta brillo. Los mismos agentes hidrantes que reparan la cutícula, desenredan y restan frizz, son, también, los responsables de una melena luminosa.
Formulados para cada tipo de pelo. Una melena teñida amerita una hidratación diferente a la de un pelo ondulado o grasoso. Afortunadamente existen numerosos tipos de acondicionadores y en La Tienda de Peluquería podrás conseguir los mejores.
Si hay un pelo que necesita de hidratación extra, ese es –sin lugar a dudas- el rizado y más si hablamos de una melena permanentada. Las ondas son malas conductoras de los lípidos producidos de forma natural por la piel del cráneo. En consecuencia, los cabellos ondulados son –en casi el 100% de los casos- muy secos de medios a puntas, rebeldes y difíciles de peinar.
Algunos expertos aconsejan –aunque suene extremo- a desterrar el champú y usar, únicamente, acondicionador. El método co-wash o co-washing (como se le denomina a la técnica de no aplicar productos de limpieza capilar) resulta beneficioso en pelos muy secos, afros o rizados.
Si aún no sabes qué hacer con tus hondas, prueba los acondicionadores Mad About Curls Two-Way de Schwarzkopf que puedes usar como un acondicionador convencional o crema de peinar. Es posible conseguir rulos perfectos en cuestión de minutos.
Ahora -si te gustan las opciones orgánicas, bajas en químicos- prueba el Be Natural Curly Monoi sin sales, sulfatos y parabenos, rico en extractos de acacia y aceite de monoi.
La acacia estimula el crecimiento del cabello, ayuda a proteger el color genuino (menos canas) y agrega flexibilidad. Mientras, el monoi, que básicamente son flores de tahití maceradas en aceite de coco, es un excelente bloqueador solar, hidratante y desenredante. Tiene la bondad de ser un aceite muy ligero, por lo que penetra y actúa de forma profunda.
A grandes males, grandes remedios. Los acondicionadores reparadores son tratamientos de hidratación intensiva que contribuyen al crecimiento del pelo, aportan flexibilidad y reconstruyen los enlaces rotos.
Cuando el cabello es sometido a constantes tratamientos químicos, ocurren rupturas en las uniones de proteínas de la fibra capilar. Solo un acondicionador con un considerable aporte proteico puede suplir las carencias y recuperar la cabellera.
No se debe confundir un cabello dañado con uno seco. Aunque a simple vista se asemejan, el pelo seco carece de humectación, mientras que una melena castigada presenta escamas, no es uniforme y resulta muy débil.
Una manera práctica de distinguir una melena seca de una dañada es tomar un cabello húmedo y tirar de él por cada extremo. Si la hebra se rompe con facilidad estamos ante un pelo dañado; mientras que si se extiende, mas no retorna a su tamaño original, es un pelo carente de hidratación.
El acondicionador Absolut Repair Gold de la línea Serie Expert de L`Oréal para uso profesional, incluye una novedosa silicona, de partículas microscópica, que penetran en el pelo, rellenando las áreas dañadas. Aunado a ello, cuenta con tecnología co-emulsión que permite la distribución homogénea de todos sus ingredientes.
Los acondicionadores reparadores Absolut Repair Gold de L`Oréal llevan, además, quínoa dorada con un alto contenido de proteína que “alimenta” el folículo piloso y estimula el crecimiento del pelo.
Pero, la gama Serie Expert tiene mucho más que ofrecer, como sus acondicionadores Pro Longer para cabello largo con puntas finas. Su fórmula, única con tecnología Filler-A100, exclusiva de L`Oréal, es capaz de engrosar cada hebra de pelo, para una melena saludable y fuerte.
Cuando hablamos de acondicionadores de uso frecuentes nos referimos a productos hidratantes con mezclas equilibradas, para mantener la salud del cabello, a la par que suavizan y eliminan los indeseados nudos.
La sección de lavado de cualquier salón de belleza debe de tener –además de productos para cada tipo de pelo- un buen acondicionador genérico. La crema suavizante de Tassel rica en extractos vegetales, aporta luminosidad y deja un pelo manejable (fácil de peinar).
Otro acondicionador de uso frecuente, también disponible en La Tienda de Peluquería, es el Long Hair Texture de OSiS+ de Schwarzkopf, que es de los pocos que se aplica en seco. Se trata de un aerosol que desenreda el pelo, no trae siliconas, deja un acabado natural y repele la contaminación.
El cabello crespo es desordenado, difícil de peinar y de apariencia poco saludable. Los acondicionadores de Revlon Proyou, para atender pelos rebeldes, impiden la formación de frizz, dan docilidad y brillo.
A fin de cuenta, es el frizz lo que hace que un pelo liso u ondulado se convierta en una melena rebelde, poco manejable y eso lo saben muy bien en Be Natural y sus acondicionadores Lisso Keratina que pone control hasta sobre las melenas ingobernables, asienta los cabellos sueltos, sin dejar de dar brillo y elasticidad.
El cabello seco –y en consecuencia quebradizo- es bastante común. La contaminación, los rayos UV, el cloro empleado para potabilizar el agua o el calor (nos referimos al proveniente del secador de pelo o plancha) resta humedad al pelo.
Existen hábitos que podemos adoptar –o dejar de hacer- para recuperar la humectación capilar. Para comenzar, debemos evitar la dependencia a los aparatos de calor. Adicional, por el bien no solo del cabello, sino de todo el organismo, es imprescindible consumir abundante agua y alimentos ricos en vitamina A (retinol), proteínas y ácidos grasos esenciales.
Finalmente, es imperioso incluir productos hidratantes y humectantes, como el acondicionador Wella Invigo Nutri-Enrich con ácido oleico (el mismo que se encuentra en las aceitunas o el aguacate) y pantenol, un potente humectante que retiene la humedad y minimiza la perdida de agua.
Igualmente, el acondicionador hidratante The Moisturizer de Revlon Pro You se vale de su composición provitaminas B5 (el mismo pantenol) para evitar que la humedad se evapore del pelo.
Las melenas pigmentadas son, después de los cabellos rizados, los que más hidratación requieren y todo porque el proceso de coloración implica productos, como el amoniaco o el peróxido, que abren la cutícula del pelo para “lavar los pigmentos” naturales y adherir colores artificiales.
A la final, obtenemos un pelazo increíble pero también muy deteriorado. Los mejores acondicionadores para pelos teñidos se ocupan de rehidratar, a la par de que prolongan la permanencia de los pigmentos artificiales.
Es así como, la emulsión suavizante Hair Care de Postquam crea una barrera protectora contra los rayos UV que degradan la coloración, mientras, en simultáneo, elimina nudos, suaviza y aviva el pelo gracias a las bondades del aceite de almendras.
Al igual, otro acondicionador que deja resultados alucinantes es el L`Oréal Serie Expert Vitamino Color con resveratrol, un potente antioxidante que se consigue de las vides, y prolonga los tonos hasta por ocho semanas.
Si te estás preguntando qué tiene de especial un acondicionador para cabellos rubios o canentos, te contamos que productos, como el L`Oréal Serie Expert Silver, contienen pigmentos azules y violetas que mejoran los tonos amarillos y plateados.
Por su parte, la alemana Schwarzkopf desarrolló el acondicionador Blondme para atender cabellos rubios maltratados (que es muy frecuente, incluso en pelos naturales debió a lo fino de las hebras) que brinda una nutrición intensiva, y deja un pelo hasta 8 veces más fuerte.
Los acondicionadores Blondme desenredan el cabello al instante, sellan la cutícula, dan elasticidad (mucha elasticidad gracias a su Complejo Cashmere Protein que ayuda a crear nuevos enlaces de proteína) y trae aceite de semillas de marula que intensifican el brillo natural.
Dependiendo de los motivos, hay un acondicionador especializado para atender los cabellos frágiles, muy finos, que se quiebran con facilidad.
En el caso de cabellos maduros débiles (entrado los años, el organismo mengua su producción de estrógeno y en consecuencia el volumen y cantidad de pelo es menor) conviene usar acondicionadores ricos en Q10, un potente antioxidante que repele los radicales libres y actúa como rejuvenecedor capilar.
En tal sentido, el Schwarzkopf Bonacure Q10+ Time Restore, es la alternativa que no debe faltar en las cabelleras maduras. Con tecnología Nutrifiller revierte los daños visibles ocasionados por el paso de los años desde el primer instante.
Por otra parte, para atender cabellos débiles, de naturaleza finos, los acondicionadores Be Natural Vital Placenta son suaves, orgánicos, de 100% origen vegetal, con nutrientes que alimentan la cutícula capilar y le dan fuerza.
Una melena fina, poco poblada o con exceso de grasa tiende a ser un pelo apelmazado, que no vibra con los movimientos y es poco coqueto.
Los mejores acondicionadores de pelo para aporte de volumen son ligeros, no añaden peso extra al pelo, contienen aceites hidratantes ultra finos para penetrar con mayor facilidad en la cutícula y –de ser el caso- proporcionan grosor.
Los productos Revlon Proyou The Amplifier con tecnología Volume Boost son lo mejor que le puede pasar a una melena pobre y apelmazada. Sus principios activos “inyectan” volumen, elimina los nudos y deja una cabellera loable, fácil de peinar.
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